miércoles, 30 de julio de 2008

Chichimecas.

Vocablo despectivo que usaban los aztecas y los colonos sedentarios (españoles, mestizos) para denominar a los aborígenes que habitaron el actual norte de México; el significado de la palabra suele traducirse como “hijos de los perros” o “chupadores de sangre”. Los chichimecas eran cazadores-recolectores nómadas o seminómadas, conocedores profundos de la naturaleza y sin jerarquización sociopolítica y religiosa importante. Sus tribus o federaciones más importantes fueron los Zacatecos, los Huachichiles, los Coahuiltecos, los Pames y los Tamaulipecos.
Al igual que en otras regiones de México, el nombre suele usarse de manera peyorativa, como sinónimo de gente salvaje o rústica. En mucho menor grado se usa el nombre o una abreviatura del mismo, “Meco”, para referirse a la gente en general; por ejemplo, el más famoso grupo de tamborazo linarense es conocido todavía en las rancherías como Los Chichimecas de San Julián.

No parece ser un caso aislado en el mundo, cabe decirlo. Hace unos cuantos días, en Colonia, Alemania, así como en Londres, grupos análogos a los chichimecas que se apoderaron de la UNAM, organizaron simultáneamente una gran marcha anticapitalista. El objetivo: acabar en el acto con el capitalismo.

(Víctor Kerbert, “La raza sin espíritu”, en: El Norte, Mty. 24-VI-1999, p. 6)

Véase: Cócono, Coyote, Cuajuco, Cuervo, Cueva, Hormigas, Hualahuises, Indios, Pauraque, Pedro José, Piedras, Rayados, Trueno, Venado, Virgen del Chorrito.

viernes, 25 de julio de 2008

Chile del monte (Capsicum annuum).

Condimento típico recolectado por temporadas para el autoconsumo y la comercialización. La gente del campo asegura que no se puede sembrar, y es utilizado por curanderas; éstas realizan sahumerios con sus plantas y los aplican a personas embrujadas. Las brujas pueden ser invocadas si se les ofrece este producto con sal.

Hay brujas buenas, que se dedican a hacer el bien, deshaciendo los hechizos y devolviendo la salud a los que tienen el mal compuesto.
Unas las curan con ahumazos de chilpiquín y hierbas aromáticas, mientras rezan ciertas oraciones en voz ininteligible.

(Manuel Neira Barragán, La medicina popular y la brujería en Nuevo León y Coahuila durante los siglos XVIII y XIX, p. 18)

O sea... aquí se acostumbra que hay una frase que le dicen a las lechuzas que son gentes, transformadas en gente; les dices “mañana vienes por... mañana vienes por sal y chile”, o algo así.
Sí, entonces... entonces esa persona... esa persona en la mañana ¡lógico que viene y te pide eso!, te pide chile o te pide sal, o te pide otra cosa que no sea eso. Pero viene y te pide algo.
(Gloria Esthela Ruiz Herrera; Parás)

Véase: Bruja, Curandero.

domingo, 20 de julio de 2008

Chimole.

Palabra usada en la región para denominar los preparativos de una fiesta de rancho, especialmente la elaboración de los alimentos; es de por sí una celebración previa e incluye música en vivo. Deriva del vocablo náhuatl chimoli: salsa de chile.

No pos chimole significa... chimole son los que la hacen... chimole son los que lo hacen, los que van a hacer el chimole... Es cuando se hace una comida para una fiesta, entre muchas mujeres, ¿verdá?, cuando se hace una comida entre muchas mujeres para... pos vamos a decir para “x” fiesta.
(Juan López García; General Terán)

Viene siendo lo que preparan, toda la comida hecha para otro día. Entonces se iba uno ¡pos dizque al chimol!, ahí platicaba uno con los muchachos, moliendo, haciendo tortillas, cociendo carne; bueno, de todo se hace en él. No dormíamos en toda la noche, el viernes en la noche, pero entonces en la madrugada, cuando ya iba a amanecer, dejábamos el molino y se arrancaba uno a bailar con la tambora y el clarinete.

(Modesta Murillo Rodríguez; Linares)

martes, 15 de julio de 2008

Chupacabras.

Ser imaginario que durante finales de la década de los noventa (1996-1998) asoló regiones de América central y Norteamérica. Lo describen como un ser alado y humanoide que ataca animales de corral, succionándoles la sangre.
Aquí, al igual que en otras partes, la idea del monstruo se construye a partir de historias tradicionales sobre espantos o bestias desconocidas, los ataques de depredadores (pumas, coyotes, comadrejas) a ciertos animales de granja, y de los informes sobre el ente aparecidos en los medios masivos de comunicación.
A pesar de que los ataques de animales salvajes son relativamente comunes en el campo, y de que la sequía impulsa a beber la sangre de las presas, el Chupacabras acentuó miedos, generó alarma y hasta movilizó a las autoridades. En los municipios de Salinas Victoria y Cadereyta Jiménez lo balacearon; en Villa de García, agentes judiciales de un grupo especial (tipo comando) lo emboscaron en una cueva; mientras que en el sur, una variante reciente del mismo (1998), bautizado por la prensa como “El Monstruo de Galeana”, generó desasosiego en las comunidades y movilizó a una partida de soldados. Gallinas, chivos, borregos, cerdos, perros y vacas fueron sus víctimas a lo largo y ancho de la entidad.

Iban en el carro compacto que era un jeep, es un jeep, y llevan unos focos para aluzar; y dicen que antes de... dos ¡Nombre! No le miento, veinte minutos antes de llegar a Saltillo vieron algo que iba adelante de ellos ¡volando!, en el jeep. Entonces estos chavos aluzan a esa cosa que iba volando y era un pájaro enorme...
Por las características y por la película tenía luz propia –el pájaro–, emitía una luz del techo y las alas eran de un gris plata. Entonces dicen que tenía características... No le lograron ver la cara, pero en la película sale perfectamente el cuerpo, y dicen que tiene las características del famoso chupacabras, ¿verdad? Entonces, ahorita siguen investigando. Pero dicen que llegó un momento en que... rebasaron una camioneta ellos y la camioneta se orilló, o sea, se asustaron mucho y dicen que al quererse salir ellos también de la carretera (porque la película ya se había terminado), para orillarse y regresarse para Monterrey, ¡el pájaro se regresa!, se regresa y los empieza a seguir.
¡Eh!, obviamente ¡pos! somos humanos, ¿verdá?, y aunque ellos se dediquen a investigar pos sí les entró, pues ¡pavor, pánico!, porque esta cosa venía pegada a ellos por sobre la ventana del conductor y... y no le lograban ver la cara; era un... un animal enorme del tamaño prácticamente de una avestruz.
(Señora; Monterrey)

Cuando en la ciudad de Monterrey se difundió la noticia de que el Chupacabras vivía en la Cueva de la Boca, Nuevo León, la multitud enardecida quiso prenderle fuego, pero fue detenida por una valla de niños.
Eran los alumnos de la escuela Francisco Cirilo, de Villa de Santiago, quienes a unos cuantos meses de haber iniciado un taller con especialistas ambientales habían tomado una decisión: ellos mismos se encargarían de impedir que se les hiciera daño a los murciélagos de la zona.

(Rosario Manzanos, “Los niños, promotores de la salvación de los murciélagos, según un programa México-Estados Unidos”, en Proceso 1180, p. 64)

Véase: Espantos, Cacería, Pantera.

jueves, 10 de julio de 2008

Chuparrosa (Lampornis Clemenciae).

Denominación del colibrí; se utiliza seca y en polvo como amuleto para el amor.

Animales de buena suerte: la chuparrosa. Ese pajarito decían quesque era de muy buena suerte, ¡ah, cómo matábamos chuparrosas nosotros! Pescábamos animalitos de ésos en las matas pa la buena suerte.
Las guardábamos y las disecábamos, las disecábamos bien, bien; luego las traíamos, así, en una cajita, o cuando salía uno, ¡era la buena suerte!
Cuando las matábamos las abríamos y les echábamos pajita o aserrín, y quedaban como si fueran vivas, bien curiosas, las ponía uno así de adorno.
Espiábamos las chuparrosas y allá cada cuando... allá de lejos en lejos, pescábamos una. Son bien vivas, pero eran buena suerte.
(Esther García Vázquez; Linares)

sábado, 5 de julio de 2008

Desobedientes.

Hijos que por no respetar a sus padres o transgredir una costumbre reciben un castigo ejemplar. Entre los casos más representativos se encuentran los enterrados y las mujeres convertidas en sirena. Se refieren para atemorizar o prevenir a quienes no acatan la autoridad familiar.

Bueno, una mujer se estaba peinando y le dijo la mamá que fuera a peinarla a ella, pero como la hija no quería, le contestó: “¡Ay mamá, cómo friega usted!”.
Como quiera al fin agarró el peine y se puso a peinar a su madre, pero le dio un estirón muy fuerte y se quedó pegada. Entonces se las comió la tierra, se las comió a las dos (a la mamá también). Platican que se veía que estaban así, engarruñadas.

(Concepción Maldonado Guerrero; Hualahuises)

Según esto, alguien le había faltado el respeto a la mamá, por ahí viene la historia. Parece que después de un regaño le contestó a su madre, pero ésta, al irse, le dijo:
–¡Te va a salir el diablo!
–¡Que me salga! –exclamó el hijo desafiante– ¡yo me chingo [peleo] con él!
Y en la noche llegó –cuentan– bien rasguñado, se encontró con el diablo y le tiraba machetazos, le tiraba, pero ¿a quién le pegaba? A nadie, y de allá pa acá no fallaban.

(Juan López García; General Terán)


Véase: Enterrados, Espantos, Sirena.